NATURALEZA HUMANA – Luis de Francesco


El extractivismo marítimo y la pesca artesanal



Luis de Francesco es pescador artesanal de Puerto Madryn, Península de Valdés. – www.facebook.com/luis.defrasncesco


La pesca artesanal se hace con pequeñas embarcaciones, lanchas de 7 u 8 metros. Es una pesca selectiva y hecha manualmente por pescadores. Donde están recolectando los productos o los mariscos y están seleccionando los más grandes y dejando los más chicos para los meses subsiguientes o el año siguiente. Se recolecta nada más que los adultos y sabemos que quedan las especies más pequeñas para los años posteriores. En cambio, si en ese mismo lugar pasara una red de arrastre, levantaría todo y no dejaría nada. Y no sólo que no dejaría nada, ni el chico, ni el grande, ni el mediano, sino que lastimaría el sustrato del fondo, donde pone en riesgo la fijación de próximos bancos de mariscos para el año que viene. Una de las problemáticas que tenemos nosotros los pescadores artesanales en la Península de Valdés, es la pesca ilegal. Porque es una pesca que no respeta los tiempos de captura, no respeta los tiempos de marea roja. Nosotros los pescadores artesanales habilitados, tenemos un cupo de captura y los ilegales no lo respetan y no son controlados por los organismos del Estado, porque son pescas furtivas y terminan siendo una competencia desleal que está afectando mucho la pesca artesanal de la Patagonia. Hay que tener en cuenta también a la pesca industrial, que es una pesca realizada por grandes barcos con grandes redes de arrastre que van hacia bancos con objetivo de buscar las especies con mejor valor comercial en el mercado, y todas las especies acompañantes que vienen son desestimadas y tiradas muertas de vuelta al mar. Aunque hay leyes que dicen que deben traer todas las capturas acompañantes, pero esas leyes no se respetan. Traen nada más el producto que es de mayor valor comercial, como es en estos momentos el langostino, por ejemplo, sobre explotando la vida de los mares. Y en este contexto están las salmoneras industriales, que son cultivos de grandes cantidades de peces hacinados en piletones, a veces son piletones en el mismo mar, donde queda mucha contaminación, donde entre ellos mismos se crean enfermedades, donde hay que aplicarles antibióticos, donde se le aplican colorantes a la alimentación para que tenga un buen color la carne para que sea agradable a la vista al consumidor. Sabemos que el cultivo y la maricultura es una de las formas de poder obtener peces para la alimentación humana, pero cuando se lleva a grandes escalas, es perjudicial, porque se está haciendo un producto de mala calidad. Y en este panorama tenemos el problema de los plásticos en los océanos, yo que soy buzo los estoy viendo permanentemente bajo el mar. La gran generación y concentración de plásticos se hace en los grandes centros urbanos, en las grandes ciudades turísticas y generalmente la mayor problemática está para el lado de la Patagonia porque los vientos predominantes son siempre de tierra hacia el mar, entonces todos los nylon que están sueltos en el ambiente, terminan en el mar. Se hacen icroparticulas y se depositan en el mar y quedan por años ahí. Y no se degradan. Así que hacen un daño al fondo del mar y a los peces y al hábitat de esa zona.