NATURALEZA HUMANA – Pablo Lada


La ausencia de un plan de contingencia ambiental



Pablo Lada es integrante del Movimiento Antinuclear de Chubut, desde donde hace varios años vienen participando contra la mega-minería y en contra del desarrollo nuclear, desde el intento de instalación del primer basurero nuclear en Gastre, que se pretendía implementar en la década del 90. – www.facebook.com/Movimiento-Antinuclear-del-Chubut


El panorama que tenemos en este momento de centrales nucleares son 3 funcionando. Que en realidad serían 2, porque tenemos una central en la provincia de Córdoba que está apagada, porque está en un período de ampliación de su vida útil, es decir que caducó su vida útil. Después están las dos Atuchas. Y hay un plan que viene desde hace varios años, desde la década de la dictadura para construir 5 o 6 centrales nucleares. Este año, 2017, nos tocó fuertemente un debate muy grande en Río Negro, en el límite con Chubut, donde nosotros participamos activamente en toda esa discusión, porque querían poner una central nuclear de origen chino, un prototipo para colmo (no es que sea mejor o peor, el tema es que no conocemos como funciona porque no hay ninguna funcionando en el mundo). Y la movilización popular consiguió frenar ese proyecto, consiguió una ley, que en este momento está frenando la posibilidad de que avancen. En su funcionamiento liso y llano, ya es riesgosa porque emite radiaciones al ambiente. Es una de las cosas que más oculta la industria, suele decir que no hay emisiones. Eso es falso. Hay emisiones, solo que la industria nuclear la consideran aceptable en un funcionamiento normal. De hecho si miramos los informes de la ampliación de Embalse que está parado en este momento, ahí dicen claramente todos los elementos y tipos de radiaciones que van a ir a parar al ambiente y que van a ir a parar al embalse. Lo reconocen en esos escritos. Y alrededor del mundo hay numerosos estudios respecto a los impactos de las centrales nucleares cuando se encuentran funcionando correctamente. Después está la posibilidad de que en una central nuclear haya algún accidente catastrófico. Esa sola posibilidad, de solo pensarlo, aunque digamos que acá en Atucha hace 30 años que anda y supuestamente no ha pasado nada grave, pero hay que tener en cuenta que no hay estudios en los alrededores sobre qué impactos hay en las poblaciones. Donde sí se hicieron estudios se detectó aumentos de índice de leucemias en niños, sobrevidas en los nacimientos, de eso hay decenas de estudios alrededor del mundo, desde los años 60. Y aquí no hay estudios al respecto. Ahora si ocurre un accidente, se acabó. Hay que poner un cartelito que diga zona no apta para la vida humana. Es la única industria que tiene la capacidad de tornar a los territorios en inhabitables. Es la única, no hay otra industria, salvo que haya una guerra. Habría que poner un cartel que diga, zona no apta, no entre más por 1000 años, 2000 años o 24000 años, que es lo que dura el plutonio de vida media y ante un accidente nuclear los territorios se pierden por ejemplo para el caso productivo. En las discusiones que tuvimos en Río Negro, el único reconocimiento que hizo el Sub-secretario de Desarrollo de Energía de la Nación, Julían Gadano, que fue muy útil, dijo: “están exagerando, acá si hay un accidente no se va a morir nadie, nos vamos a morir de hambre, eso sí, porque no le vamos a poder vender nada a nadie…” Y eso es muy cierto, no solo en Chernovil se perdieron territorios, sino que cientos de miles de hectáreas dejaron de ser productivas. Cientos de miles de hectáreas agrícolas, de madereras, que ya no se puede hacer absolutamente nada.


Ante un accidente se habla de hasta 500 km. Pero podemos pensar en 200 km a la redonda. Si bien cuando hay accidentes lo minimizan a un radio de 30 o 40 kilómetros, que son las zonas que declaran inhabitables. Un ejemplo muy concreto es cuando ocurre lo de Fukushima. Primero me impresionó cuando el quien era el Primer Ministro de Japón, en la gran crisis nuclear de Fukushima, en 2011, Naoto Kan, dijo que había habido la valentía de los llamados héroes de Fukushima que actuaron inmediatamente y dijo que hubo una dosis de suerte, que en el momento de crisis el viento sopló para el lado del mar. Si hubiese soplado para el lado de donde está Tokio, que es la ciudad más densamente poblada del planeta, con 40 millones de habitantes, probablemente hubiese habido que evacuar Tokio. Eso lo dijo el Primer Ministro de Japón. Lograron controlar ese momento de mayor emisión y tuvieron la suerte de que el viento sopló para el otro lado. Hace poco vi esto reconocido en el New York Time, porque acá no salió en los grandes medios de difusión. Reconocieron el riesgo que hubo en ese momento de crisis nuclear. Sigue estando la crisis, pero ahora un poco más controlada. Pocos meses después, un conocidísimo ingeniero nuclear que se llama Andy Anderson, que hoy lo escuchás y parece un antinuclear a raíz de todo lo que pasó en Fukushima, fue y tomó muestras. Se fue a un jardín donde juegas los niños, se fue a una terraza, fue a distintos lugares de Tokio, lo puso en una bolsita, se fue a Estados Unidos, lo hizo analizar y el resultado es que había que considerarlo en ese país como desecho radioactivo. Nos estaban diciendo que Tokio estaba liberada, a 240 kilómetros de Fukushima, para que tengamos idea del radio de afectación, y eso va a afectar por supuesto la salud y se va a ver a futuro, como pasó con Chernovil, 10 o 15 años después de cuando empezó la eclosión. En Ucrania es donde debe haber más orfanatos en el mundo para niños discapacitados. Ha habido una eclosión de distintas patologías, que se empiezan a ver los impactos unos años después del accidente.


En Argentina no han hecho estudios estadísticos y tampoco hay información de qué es lo que tiene que hacer la población ante el caso de una contingencia grave. No existe esas posibilidades. ¿Qué es una contingencia grave? La industria nuclear tiene una escala internacional que se llama INES, donde 7 sería lo más grave, Chernobil, Fukushima. Acá no hacemos previsiones. Acá donde están las Atuchas, o en Embalse, qué tiene que hacer la población si ocurre lo que ocurrió en Ucrania, en Pripyat que era cerca de donde estaba el reactor nuclear de Chernobil, una ciudad de 50.000 habitantes que tuvo que ser vaciada de la noche a la mañana… ¿Qué tiene que hacer la gente que vive cercana a los reactores ante una situación grave? ¿se tiene que quedar encerrada en la casa? ¿tiene que salir? Evidentemente no quieren asustar, porque si habría un plan de contención planificado, sería una forma de afirmar la posibilidad de que algo grave puede pasar.