NATURALEZA HUMANA – Perla Herro


Biodiversidad, alimentación y alternativas



Perla Herro es cocinera, educadora y artista. Da clases de cocina en Laboratorios del gusto para niños. Es coordinadora de Slow Food Argentina. – www.facebook.com/slow-food-argentina


Tenemos que dejar de ver la biodiversidad como una palabra compleja porque en realidad es un tema sencillo. Son todos los seres vivos que hay en este planeta, desde los más pequeños y simples como las bacterias, el increíble universo vegetal, las especies animales, hasta alcanzar las categorías más complejas como los ecosistemas. La diversidad es un pasaje con seguro hacia el futuro, un sistema variado que tiene su propia inmunidad ante enfermedades, cambios climáticos o situaciones inesperadas que pudieran ocurrir. No podemos ni debemos sostener un sistema alimentario tan perverso que rompa todos los ecosistemas, que ponga en riesgo a todas las especies, incluyéndonos. Pero con la agroindustria, la polución de tierras y océanos, los agrotóxicos, generamos una gran paradoja del desastre. Aunque no todas las actividades humanas son perjudiciales, estamos los que amamos el suelo, están los campesinos, los pastores, los pescadores artesanales, los integrantes de los pueblos originarios, su conocimiento ancestral. Pero de cualquier manera las plantas y los animales que los humanos elegimos, están en riesgo.

Ese mundo de colores del supermercado que parece tan variado y lleno de sabores, es en realidad un nuevo cuento de ciencia ficción, un mundo hecho de maíz, y tal vez de trigo y de arroz, en menores proporciones. Cereales genéticamente modificados que se cultivan como alimento para animales, comida forrajera, alimento balanceado, eso es lo que estamos comiendo hoy. Un producto homogeneizado que llega a nuestra mesa lleno de grasas, de sal, de azúcar, aceites de mala calidad y harinas vacías. Parece que otra vez estamos en el trueque de los espejos de colores, y nos llevamos esto y lo cambiamos por la salud de la tierra y la salud de nuestros hijos. Lo cambiamos por nuestra comida verdadera, por nuestras costumbres locales, por nuestra costumbre alimentaria.

¿Y qué podemos hacer para transformar esta situación? Podemos apoyar con nuestra compra, que es un voto a los que producen alimentos sanos, seguros y soberanos. Podemos apoyar la compra directa de manos productoras, comprar en mercados o en cooperativas que nucleen a productores. Porque definitivamente no hay comida en el supermercado, no hay comida verdadera en el supermercado. Además, hay un gran cambio y hay que cocinar. Esto va a traer un gran cambio, hay que entrar a la cocina y ahí va a comenzar esta transformación. Me parece que es una situación urgente y debemos decidir de qué lado de la vereda queremos estar.