NATURALEZA HUMANA – Raúl Zibechi


Muros reales y muros simbólicos



Raúl Zibechi es escritor y periodista uruguayo. Su trabajo teórico está destinado a comprender y defender los
procesos organizativos de los movimientos sociales.


Hoy en día hay decenas, quizás cientos de muros. No creo que haya un censo de muros. Los dos más conocidos son los de México y Estados Unidos, que ya está construido en un tercio y que el presidente Trum quiere terminar. Y el que divide Israel de los territorios Palestinos.
Pero hay cientos, miles, millones de muros simbólicos, como el que hay en la provincia de Córdoba, a raíz de los chicos que portan gorra, portación de cara, de rostro, que provoca la marcha de la gorra, como respuesta.
¿Los muros, qué dividen? Dividen aquello que Fanon planteaba, la Zona del Ser, donde las personas son respetadas, donde su vida tiene un valor y los conflictos se resuelven más o menos de manera dialogada y la violencia es excepcional. Y dividen la Zona del No Ser, que hablando entre nosotros son las periferias urbanas básicamente, donde habitan los sectores populares, en donde la violencia es la forma cotidiana de resolver los conflictos, la violencia es la que modela las relaciones entre
el Estado y los sectores populares, entre la policía y la población, etc. Yo creo que a Fanon hay que complementarlo en ese brillante análisis, con lo que dijo Agamben, que es un filósofo italiano que plantea que después de la Segunda Guerra Mundial, y después del Genocidio Judío, el paradigma de la Modernidad es el campo de concentración.
Uno dice campo de concentración y suena muy exagerado, ¿dónde están? Pero para el que vive dentro de un pueblo fumigado, en una zona sojera, es un campo de concentración sin muros, sin alambradas. Pero vaya si el glifosato, si los mosquitos, si las fumigaciones no son parte de ese muro simbólico que está cercando a los de adentro y los está condenando a una muerte silenciosa, a largo plazo, como las cámaras de gas… De hecho se sostiene que en los pueblos fumigados hay cuatro o cinco veces más casos de cáncer que en el resto de Argentina. Por eso es necesario mostrarlo, hablarlo y resaltar estas situaciones y estas realidades.